Cuando la ilusión ya no existe, sientes que ya no hay razón para disfrutar de la vida.

Si perdemos la ilusión, no podemos disfrutar de los momentos felices de la vida, sentimos que ya no hay razón de vivir; y eso, sí que es un riesgo que debemos de superar, en alguna etapa de nuestra existencia.

Esto sucede como cuando caemos en la depresión y en la melancolía, nuestro estado de ánimo decae, es importante lograr superarlo, para recuperar la ilusión de vivir. Una persona sin ilusión se le ve en la mirada, le falta el brillo en los ojos y el entusiasmo, en su forma de hablar.

Saludos, hasta la próxima semana.