Lo que para unos es una
desgracia o tragedia, para otros es un negocio. Lo mismo, para unos es basura,
para otros es dinero y así; para unos es desecho, para otros es alimento.
En esta frase junté tres
frases similares, en la que la idea central es que la vida, desde cualquier
punto de vista o perspectiva, nos enseña a que no todos vemos el mismo problema
desde el mismo enfoque o desde el mismo ángulo, sino que cada uno de nosotros
lo siente, si uno está involucrado u otra persona es la protagonista.
Todos no queremos
enfermarnos o tener un familiar enfermo, pero las enfermedades no distinguen
entre la sociedad, sexo religión y edades, se tiene que dar tratamiento para
superar las enfermedades, a cualquier coste de los medicamentos, que los
laboratorios fabrican, y el pago de honorarios del médico. De igual manera en
su caso, los servicios fúnebres, los hay de diferentes precios, pero todo ser
vivo algún día tiene que fallecer.
Cuánta gente no vive de la
basura para separarla, venderla y reciclarla, es un negocio.
El desperdicio de los
alimentos pueden servir de alimento para los animales de la granja, para la engorda
o para el abono de la tierra, como fertilizantes.
Todos en la primaria hemos
aprendido del ciclo de la vida y, tarde o temprano, también nosotros somos parte
de ese ciclo.
Todo es un negocio, desde
el pago de impuestos hasta todos los servicios de la vida moderna.
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